- Samuel Prieto Rodríguez
Televisión vs OTTs, la pulverización del negocio audiovisual

Fidela Navarro es muy clara: a TV Azteca no le interesa crear un servicio OTT (Over The Top). "Nuestra prioridad son los canales de televisión abierta porque los vemos también como generadores de contenidos y en ese sentido, la reinvención de Azteca lo que pretende es ofrecer mejor contenido que viaje a otras plataformas, no que las desarrollemos", afirma la directora de TV Azteca Internacional.
"Las fórmulas para que nuestro contenido tenga mayor alcance son infinitas, nos dan opciones a todos, además de que las inversiones se dividen. No buscamos competir sino complementarnos", explica la ejecutiva.
Entre otras producciones realizadas con ese esquema está Abandonados, reality grabado en Camboya, Vietnam y Asia, programa exitoso que ya tiene varias temporadas en otros países. También Lip Sync México, formato de entretenimiento en coproducción con Viacom, y Hasta que te Conocí de Disney Media Distribution Latin America, Somos Productions y BTF Media.
Incluso, esta idea de centrarse en la coproducción de contenidos incluye a la competencia, Televisa, que tiene una estrategia distinta porque sí está construyendo un ecosistema digital multiplataforma con todo y su servicio de streaming llamado Blim.

Junto con la productora Eureka, TV Azteca está produciendo la serie Entre Correr y Vivir para transmitirse en su pantalla de lunes a jueves y luego poner esos 4 episodios semanales los viernes en el sistema de internet de su competidora televisiva.
Y ya que estamos en Blim, para reforzar su presencia en el mercado Televisa decidió mantener ahí sus contenidos propios como exclusivos, retirándolos de Netflix, lo que significó un golpe fuerte para esa empresa estadounidense al menos en México.

La publirrelacionista para América Latina de esa plataforma, Kari Pérez, había reconocido en declaraciones para la revista Forbes que 2 de los contenidos más vistos que tenía eran Rebelde y Teresa, ambas telenovelas producidas por Televisa. Otras producciones con mucho éxito eran El Señor de los Cielos y La Rosa de Guadalupe. Sin embargo, Netflix decidió mantenerse estoico e incluso se burló de la salida de esos programas de su catálogo.
El director ejecutivo de Netflix, Reed Hastings, dice que “Blim será un éxito al resaltar su propio contenido en su plataforma, pero eso no le quitará nada a Netflix”, sistema que lleva 5 años operando en México, tiene 5.5 millones de suscriptores y 25 producciones originales en su catálogo, 2 de ellas hechas en Latinoamérica: Ingobernable y Club de Cuervos. Para el próximo año, la firma hará inversiones por 6 mil millones de dólares en contenidos propios.
Televisa retiró de Netflix 13 producciones. Ahora, varias de ellas son exclusivas de Blim como María de todos los Ángeles y La Familia P.Luche. Se esperaría que suceda lo mismo con las restantes que aún no figuran en su catálogo. Estas se agregan a las 8 originales que ha estrenado desde su lanzamiento el 22 de febrero, a las 4 series que tiene actualmente en producción y 3 más a punto de estrenarse en los meses próximos.

Más aun, Televisa anunció la firma de 2 acuerdos con NBC-Universal y Telemundo para la distribución de sus contenidos en México y América Latina por sus canales de televisión y específicamente por Blim en el caso de las producciones de Telemundo, cadena de habla hispana en Estados Unidos que ha dado varios dolores de cabeza a la líder, Univisión, con sus niveles de audiencia últimamente.
¿Será sostenible esta guerra en el largo plazo? Definitivamente, la competencia da opciones reales al consumidor, aumenta la calidad y mejora los precios. Pero desde otro punto de vista, la TV por internet se está pulverizando en servicios de nicho, lo que lleva a los suscriptores a pagar varios que resultan más costosos que un servicio de televisión de paga, comenta Jenaro Martínez, director de evolución tecnológica de Axtel.
En México hay más jugadores en ese mercado como Claro Video, HBO Go, Dish OTT y varios otros más, también con producciones exclusivas de amplia popularidad.
En algún punto y luego de muchos desgastes, pérdidas, fracasos y enfrentamientos comerciales, la industria reencontrará un equilibrio. Por ahora, las estrategias para el corto plazo ya están definiéndose. Falta ver también de qué manera se sube a este contexto la nueva cadena de televisión nacional.