- Samuel Prieto Rodríguez
Intrigas, racismos y escándalos sexuales, la podredumbre en la política y los medios conservadores e

Subámonos un poco al tren del chisme. Resulta que Donald Trump está enojado con Steve Bannon, uno de sus dos estrategas más cercanos, identificado como el alma de las ideas más ultraconservadoras, radicales, “globalifóbicas”, nacionalistas, populistas y autoritarias de la administración. Lo mantiene en su primer círculo pero quitándole la silla que había accedido a darle en el Consejo de Seguridad Nacional, lo que es leído por sectores más institucionales como un regreso a la normalidad dado que no es usual la presencia de asesores políticos en las reuniones de un organismo técnico que diseña estrategias. Otros lo ven como la victoria del 'establishment' republicano sobre el líder detrás del populismo del mandatario.
Bannon es uno de los personajes más polémicos de la élite trumpista por sus ideas. Como director de Breitbart News, medio ultraderechista, impulsó un historial vasto de publicaciones con sesgos antisemitas, misóginos y racistas. El periodista político Joshua Green lo describió en 2015 como “un refugio para las personas que piensan que Fox News es demasiado educado y comedido”, para dar una idea de los radicalismos en que incurre.

Al parecer, la remoción de Bannon ya se esperaba. La clave fue puesta en pantalla por un cliente frecuente del tuitero en jefe y en sus ratos libres presidente de Estados Unidos, con su segmento cotidiano titulado “fake news”. CNN publicó un video grabado desde lejos a través de una ventana de la Casa Blanca en que se nota una discusión bastante encendida. Según la nota, Trump estaría muy molesto con su staff de alto nivel y el de comunicaciones por no contener el escándalo del fiscal general, Jeff Sessions, quien mantenía contactos con la inteligencia rusa de la que presuntamente recibía apoyo para la campaña presidencial republicana. Sessions no ha caído, se mantiene bajo una investigación de la que obviamente se recusó, pero Michael Flynn sí tuvo que dejar de ser el asesor de seguridad nacional por ese mismo enredo.
En la discusión del video, Bannon tuvo un enfrentamiento de altos decibeles y manoteos con Ivanka Trump, quien también tiene una posición de bastante poder en el gobierno de su padre.
Los desacuerdos entre hija y amigo del presidente han sido historia habitual. Por ejemplo, Bannon es partidario de que Estados Unidos abandone el Acuerdo de París que obliga a los países que lo suscribieron a impulsar políticas contra el calentamiento global, pero Ivanka y el secretario de Estado, Rex Tillerson, están en contra de abandonar iniciativas en favor del medio ambiente no sólo por conciencia ecológica sino porque hacerlo dejaría mal posicionado al país en futuras negociaciones y abriría la puerta para que China y Alemania se embolsen más liderazgos.
Además de las disputas cotidianas con Ivanka, las derrotas políticas recientes de Donald Trump han debilitado tanto a Steve Bannon que hasta al Air Force One ha tenido que ingresar, literalmente, por la puerta de atrás.

Las intrigas palaciegas ventiladas en los medios compiten perfecto con tramas netflixianas como House of Cards o Scandal. Pero dentro del medio de comunicación preferido por la actual administración estadounidense, el conservador Fox News, como diríamos los mexicanos de a pie, “no venden piñas”.
De acuerdo con una investigación publicada por The New York Times, otro de los miembros del club de las “fake news” en la cuenta personal de Twitter del POTUS (President Of The United States), Fox News ha pagado unos 13 millones de dólares para detener demandas legales y acallar denuncias públicas de 5 empleadas que han sido víctimas del acoso sexual del periodista estelar Bill O’Reilly.

Dos de esos arreglos sucedieron incluso después de que Roger Ailes fue despedido como presidente de esa cadena de noticias también por acoso sexual a varias mujeres, entre ellas la conductora Gretchen Carlson a quien sacó de la nómina por negarse. Otra afectada por esa costumbre arraigada en el canal de televisión es la también presentadora Andrea Tantaros quien dijo que “Fox News se hace pasar por un defensor de los valores tradicionales de la familia pero detrás de cámaras funciona como un culto a la Mansión Playboy empapado de intimidación, indecencia y misoginia”. Ella fue acosada tanto por Ailes como por O’Reilly, de acuerdo con sus denuncias, lo que convirtió su paso por las pantallas de esa empresa en un infierno.
Conservadores con la bandera de la devoción pero comportamientos racistas, misóginos y bastante pervertidos. En realidad, nada nuevo.