- Samuel Prieto Rodríguez
OCDE. ¿Canales de TV abierta mexicanos en manos de extranjeros?

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico aplaude la Reforma en Telecomunicaciones mexicana de 2013 y dice que el IFT es un buen niño. Nada mal. Ha cumplido 28 de las 31 recomendaciones que el organismo internacional hizo en 2012, el sector ha crecido más que la economía en general, hay más televisión abierta, las tarifas de la telefonía e internet han bajado, en fin, la calificación es bastante buena.
El nuevo Estudio de la OCDE sobre Telecomunicaciones y Radiodifusión en México 2017, sin embargo, hace algunas sugerencias nuevas que tocan fibras sensibles.
¿Qué tal una estación de radio o canal de TV abierta en México como propiedad y con programación de ABC, CBS, NBC o Time Warner? Pues eso es algo de lo que puso ahora sobre la mesa. Su argumento:
“La inversión extranjera directa (IED) en el sector de telecomunicaciones, incluyendo los servicios satelitales, actualmente se admite sin ninguna limitación (100%). Por su parte, la IED en servicios de radiodifusión, que en el pasado estaba prohibida, ahora se permite con un porcentaje máximo del 49 por ciento, sujeto a requisitos de reciprocidad con el país en el cual esté constituido el inversionista extranjero y, según lo determine específicamente la LFTR, un dictamen favorable previo emitido por la Comisión Nacional de Inversiones Extranjeras (LFTR, 2014, artículos 71 y 77)”.
Simétrica y financieramente, tiene lógica. Política y socialmente, ¿también? En términos tangibles, un usuario de servicios de telecomunicaciones hace llamadas por teléfono fijo o móvil y entra a internet desde su computadora de escritorio o cualquier dispositivo portátil. Ese mismo usuario, pero de servicios de radiodifusión, sintoniza la estación en AM o FM de su preferencia o cualquiera de los canales de televisión abierta digital disponibles.

¿Gran cosa? En los canales mexicanos hemos visto series y películas extranjeras toda la vida. Pero ¿qué tal, por ejemplo, un noticiero en horario estelar informando sobre la política, la economía y la vida de la sociedad mexicana producido por uno de esos grandes conglomerados de medios extranjeros? ¿O un programa de análisis, opinión o debate sobre esos mismos temas? ¿Otros países lo hacen o permiten? Sí, pero veamos lo que dice el propio estudio de la OCDE al respecto.
“La reciprocidad estipula que si el país donde reside un posible inversor extranjero tiene una limitación de IED del 30%, por ejemplo, entonces México reflejaría la restricción a ese inversor; por lo tanto, el inversor estaría limitado a una inversión del 30% en lugar de un 49%”.
“El establecimiento del nuevo umbral es un cambio importante considerando que antes de la reforma constitucional no se permitía ninguna participación extranjera en las empresas de radiodifusión, si bien el establecimiento de un requisito de reciprocidad ha introducido una medida discriminatoria que debería eliminarse”.
“La reciprocidad limita el interés de México para atraer a los mejores licitantes extranjeros para licencias de radiodifusión. Es ciertamente de interés para México abolir sus reglas de reciprocidad con respecto a la IED en la radiodifusión, ya que las limitaciones de la IED y las condiciones de reciprocidad crean restricciones regulatorias para los inversionistas y excluyen el uso de inversiones extranjeras para reducir la concentración del mercado. Además, suprimir la condición de reciprocidad sería coherente con el artículo 9 del Código de Liberalización de los Movimientos de Capital de la OCDE, que excluye la discriminación entre otros miembros ‘al autorizar la celebración y ejecución de transacciones y transferencias... que estén sujetas a cualquier grado de liberalización’ (OCDE, 2016b)”.
O sea que mientras en otros países los empresarios de medios mexicanos tienen limitaciones legales para invertir y hacer llegar sus señales y contenidos, la OCDE espera que aquí se entreguen concesiones de radio y televisión así como así. Digo, de cualquier manera los radiodifusores mexicanos ya tienen fama local de defensores de intereses oscuros e idiotizadores y desinformadores de audiencias así que daría igual si lo hicieran también los extranjeros ¿no?

¿Será que ya no hay más mexicanos con capacidad e interés en invertir en el sector? Estamos en medio de una licitación que eventualmente terminaría poniendo al aire 32 nuevos canales locales o regionales, claro, no sin escándalos como el del dueño de Telsusa o el prestigio del de Radio Centro.
¿La dominancia de Televisa en este mercado es un problema? Según la OCDE, al parecer no. De hecho, hasta ofrece argumentos para quitarle la declaración de agente económico dominante:
“Con respecto a la determinación del poder sustancial de mercado, se podrían agregar varios factores adicionales a la lista formal de cuestiones a considerar para evaluar si existe dicho poder en un mercado relevante. Estos factores incluyen:
- Cambios en las participaciones de mercado a través del tiempo. Si la participación de mercado de una empresa se ha reducido de manera constante y significativa, esto podría pesar en contra de una conclusión de que la empresa tiene un poder sustancial en el mercado. Por el contrario, una participación estable o en crecimiento sería congruente con la existencia de poder sustancial de mercado. Aunque no figura entre los factores formales enumerados en la ley (LFCE, 2014, art. 59), el Pleno del IFT tomó en cuenta los cambios en las participaciones de mercado al considerar que una disminución en la participación del Grupo Televisa sugería una ausencia de poder sustancial de mercado. Sin embargo, podría ser adecuado interpretar en forma conservadora las disminuciones relativamente pequeñas y breves, así como explicar los efectos acumulativos de las adquisiciones sobre la participación de mercado de una empresa en el tiempo.
- Márgenes de utilidades. Los márgenes persistentemente altos tienden a ser congruentes con un poder sustancial de mercado, mientras que los márgenes persistentemente bajos o las pérdidas no lo son.
- Historial de entrada y salida en el mercado. Si hay muchas más empresas que salen del mercado que las que entran, puede señalar la presencia de poder sustancial de mercado. Por otra parte, un historial donde se comprueba la entrada exitosa al mercado de nuevos participantes sugeriría claramente una ausencia de poder sustancial de mercado”.

Televisa atraviesa por una crisis financiera que se ha alargado por al menos 2 años, ha perdido clientes, sus ventas de publicidad han caído, enfrenta más competencia con la llegada al mercado de Imagen Televisión y tendrá más en mercados locales o regionales próximamente. Visto así, según la OCDE, habría que quitarle el estatus de dominante.
¿Y la televisión de paga? Carlos Slim tiene mucho tiempo buscando entrar a ese mercado. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico dice que debería poder hacerlo. Su competidor, AT&T, afirma que no porque acentuaría su dominancia en el sector de las telecomunicaciones.
Lo hemos visto, estudiado y dicho desde muchos ángulos. Vivimos en una época de muchas transiciones, no está muy claro aún hacia dónde y en el camino los cambios que se van planteando son de lo más sorpresivos.