- Samuel Prieto Rodríguez
Treinta años después, la historia en el universo digital

Justo hace 30 años, 1988 lo cambió todo. Antes de esa elección presidencial, lo común era que ganara siempre y sin mayor problema el candidato del mismo partido, elegido por el mandatario en turno.
La historia ya la contamos en televisión abierta por el legendario y entrañable Azteca Trece, hoy Azteca Uno, desde tres ópticas distintas que son las de los tres protagonistas de ese momento histórico que marcó un antes y un después en la ahora todavía incipiente democracia mexicana: Cuauhtémoc Cárdenas, Manuel Clouthier ‘Maquío’ y Carlos Salinas de Gortari.
Como es absolutamente previsible con las obras audiovisuales que se convierten en referencia obligada tras su paso por la televisión, ahora es disfrutable en un grande y prestigiado servicio de streaming: Amazon Prime Video.

Ese año, la mayor ruptura dentro del partido en el poder, el PRI, dio origen a un movimiento opositor de izquierda tan grande que tuvo por primera vez una posibilidad real de llegar al poder.
La figura central, Cuauhtémoc Cárdenas, el hijo del general que terminó con el caudillismo del jefe máximo de la Revolución, Plutarco Elías Calles, a quien desterró para terminar el proceso de institucionalización del partido gubernamental, expropió el petróleo, impulsó el movimiento obrero organizado que llevó a la fundación de la CTM y creó la figura jurídica del ejido, la propiedad social del campo mexicano, por lo que es considerado el primer presidente de izquierda de la época revolucionaria.
Así que cuando Cuauhtémoc logró aglutinar, con la ayuda de Heberto Castillo y la operación política de Porfirio Muñoz Ledo, a los partidos de esa ideología pulverizados y organizaciones civiles hasta de exguerrilleros, pareció estar dando continuidad a ese ideal llamado cardenismo, con la diferencia que en vez de transformar al PRI se enfrentó con él y contendió con su candidato en una elección cuestionada porque el sistema se cayó de caerse y de callarse.

La derecha también hizo su esfuerzo histórico en la figura de un líder empresarial carismático y rudo, Manuel J. Clouthier ‘Maquío’, que había enfrentado a José López Portillo tras la nacionalización de la banca en 1982 y entendió que para ocasionar el cambio la vía no era la economía sino la política.
Clouthier fue el primer candidato en la historia de las competencias electorales mexicanas en utilizar las entonces nuevas e innovadoras técnicas del marketing político y estrategias elaboradas como la resistencia civil pacífica que los cuadros de su partido, el PAN, aprendieron de profesionales extranjeros.
¿Se acuerda del presidente legítimo de México? Andrés Manuel López Obrador se autoproclamó así, gabinete incluido, tras haber arengado “¡al diablo con sus instituciones!”, luego de que el Tribunal Electoral dio el triunfo de la elección de 2006 a Felipe Calderón. Bueno, no fue el primer gabinete espejo. Ese también fue creado tras la elección de 1988 y tenía un propósito con visión de largo plazo que fructificó con la llegada del siguiente milenio.

De cualquier manera, en 1988, tras esa caída de un sistema que existía aun cuando el uso de la PC todavía no se había generalizado e internet estaba a por lo menos 5 años de ver la luz, el priista Carlos Salinas de Gortari ganó la elección por amplio margen y se convirtió en el presidente más influyente del México contemporáneo, al grado de que 24 años después de terminado su gobierno sigue siendo el villano favorito de muchos y sus reformas e ingeniería institucional continúan vigentes en el sistema político y económico del país.

La inclusión de esta fascinante saga documental en el menú de Amazon Prime Video es un nuevo episodio en esto de hacer historia al ponerla en una plataforma digital para que, quien desee, pueda verla en el momento que guste y se sorprenda con la infinidad de datos, anécdotas y detalles que, al verlos, hacen entender por qué muchas cosas actuales suceden de la forma extraña y en ocasiones hasta retorcida en que suceden.
30 años después, la historia del año que marcó el inicio de la transformación democrática y sus encantos y desencantos puede observarse y revivirse de la manera más moderna: un servicio de streaming de talla mundial.