- Samuel Prieto Rodríguez
El regreso de Aristegui a la radio

Su regreso ocasiona alegrías y aversiones. Para unos, Carmen Aristegui es una periodista libre, ética, sin cortapisas y veraz. Para otros, una exponente evidente del periodismo militante y sesgado. Una u otra, la comunicadora es referencia, marca agenda pública y de cuando en cuando destapa cloacas. Su presencia en la radio puede no gustar, lo que se soluciona tan fácil como no sintonizarla, pero nunca sobra.

Hay tres análisis que llaman la atención. El de Javier Tejado en El Universal es que no se entiende la decisión de Francisco Aguirre de tener tres propuestas distintas de noticiero matutino: Sergio Sarmiento y Guadalupe Juárez por un lado, Carlos Loret de Mola por otro y ahora Carmen Aristegui. “Bajo ninguna lógica empresarial hace negocio el hecho de pulverizar audiencias entre tres comunicadores”.
Tejado tiene mucha experiencia en medios y es un analista respetado de muchos años, aunque en esta ocasión me permito diferir un poco. Tener tres opciones distintas es como el menú de un restaurante en que puede haber carne de res, de pollo o de pescado, según la preferencia de cada comensal. Al final del día, las audiencias se quedan en casa con alguna de las opciones y hasta puede tratarse de una estrategia para proyectar una imagen de diversidad e inclusión.
La campaña publicitaria más fuerte del grupo radiofónico con el slogan “máxima audiencia en medios” suele decir “en este momento hay más personas escuchando las estaciones de Grupo Radio Centro que viendo televisión”, aunque esa audiencia esté pulverizada en varias frecuencias.
El análisis del maestro Gabriel Sosa Plata en Sin Embargo MX tiene que ver justo con el ángulo político.
“Si José Antonio Meade, del PRI, hubiese ganado las elecciones presidenciales ¿la periodista Carmen Aristegui habría regresado a la radio abierta? Probablemente no, pese a los beneficios de tener al aire a una periodista reconocida, multipremiada y, por qué no decirlo, rentable económicamente. Y esto es así porque la política de relación entre el poder político y los medios de comunicación seguiría con Meade y su partido bajo la misma lógica de las reglas no escritas y la presión a través, por ejemplo, de los recursos de la publicidad gubernamental”.

“Grupo Radio Centro (GRC), de la familia Aguirre, leyó el cambio electoral y vio una oportunidad para incorporar a Carmen Aristegui y a su equipo de noticias en su red de radiodifusoras distribuidas en las principales ciudades del país”, agrega el prestigiado académico. “Carmen Aristegui no será la “vocera” de López Obrador; no hará el papel de Jacobo Zabludovsky en la época del partido único. Quienes conocemos profesionalmente a la periodista, sabemos que no es la periodista que cede a las presiones o las seducciones del poder político o de la empresa que se anuncia en su noticiario. También lo deben saber en GRC. Y si fuera distinto, habrá voces que la cuestionarán y exigirán a través del derecho de réplica y de la queja”.
Eso es muy posible, aunque también pasa por un hecho indiscutible: que el propio López Obrador había expresado públicamente su interés por que Aristegui regresara a la radio. No sucedió en los términos que planteó pero queda claro que la bendición del presidente electo es un gran aliciente.
El análisis de Federico Arreola en SDP Noticias, bastante apoyado en el de Javier Tejado, se va por los números fríos y objetivos:
“Estos son los ratings de agosto del 2018, elaborados por la empresa INRA, de los noticieros matutinos de radio:
1º Con 2.45 de rating, Ciro Gómez Leyva, de Radio Fórmula (104.1 FM)
2º Con 1.80 de rating, Óscar Mario Beteta, de Radio Fórmula (103.3 FM)
3º Con 1.50 de rating, Mario González, de Stereo Cien (100.1 FM)
4º Con 0.84 de rating, Luis Cárdenas, de MVS (102.5 FM)
5º Con 0.83 de rating, Pascal Beltrán del Río, de Imagen (90.5 FM)
6º Con 0.82 de rating, Sergio Sarmiento y Lupita Juárez, de Radio Centro (92.1 FM)
7º Con 0.74 de rating, Carlos Loret de Mola, de Radio Centro (88.1 FM)”
Con esos datos, su pronóstico es:
“1. En el rating de los noticieros matutinos Aristegui, en su nueva estación, quedará lejos de los líderes de Radio Fórmula, Ciro Gómez Leyva y Óscar Mario Beteta. Es lo que veo venir”.
“2. En el propio grupo radiofónico que la ha contratado no podrá superar el rating de Sergio Sarmiento en la 92.1 FM que sí es una estación de noticias, por lo que Aristegui quedará al mismo nivel de audiencia de Loret de Mola”.
“Parece mala idea del dueño de Radio Centro, Francisco Aguirre, tener tres noticieros matutinos en tres estaciones distintas. Peor idea aún si dos de ellas son musicales”.
Sólo la práctica de la idea nos dirá lo que suceda realmente. Por cierto, algunas de las suspicacias que despierta el que Aristegui haga una alianza con ese grupo radiofónico en particular son que tiene antecedentes como el pleito que sacó del aire a José Gutiérrez Vivó o el echarse para atrás luego de ganar la licitación de una cadena nacional de TV abierta.
Por cierto, Francisco Aguirre es el ganador de un canal local de televisión abierta en el Valle de México desde el año pasado y aun no se sabe cuándo y con qué contenidos lo echará a andar mientras que Multimedios, el otro ganador, ya está al aire.
¿A qué se comprometieron públicamente Carmen Aristegui y Grupo Radio Centro? A no mezclar los intereses comerciales con el trabajo periodístico y a preservar el derecho de las audiencias a estar bien informadas.
Juan Aguirre Abdó, hijo de Francisco Aguirre, dio nota al decir que ve con buenos ojos la reducción de 50 por ciento en el presupuesto del gobierno para publicidad oficial y, de acuerdo con su argumento, eso no le pegaría a su empresa sino, incluso, al contrario si es que se toman en cuenta los niveles de audiencia reales para contratar espacios.
Veamos qué sucede primero a partir del 17 de octubre con el regreso de Aristegui a la radio y después a partir del 1 de diciembre con el inicio de la nueva administración federal.